miércoles, 29 de agosto de 2012

40. (concurso) LA ULTIMA NOCHE DE AGOSTO



Tras el biombo escuchó unas voces que hablaban en voz baja y un tintineo de llaves. Un hombre y una mujer discutían algo sobre un coche. La voz masculina hablaba nerviosamente mientras que la femenina lo cortaba exigiéndole tranquilidad. Esa voz era sumamente fría, monótona. Permaneció tras el biombo hasta que escuchó como unos pasos se encaminaban hacia la puerta cerrándola. La oscuridad de la estancia era violada por la luz de la luna llena de Agosto. Una tabla crujió fuertemente bajo sus pies haciendo que se detuviera de pronto y permaneciese inmóvil con un pie en alto que descendía con cuidado hacia el suelo.

Sintió frío. Mucho frío, a pesar de que momentos antes el calor le parecía insoportable. No sabía muy bien que hacía en aquel lugar. Se acercó a la ventana. Una cortina cubría los cristales. La apartó descubriendo unos grandes árboles que movían sus ramas golpeando la cornisa. Un perro ladraba a lo lejos. Cada vez más cerca hasta que  divisó como su perfil se detenía y ladraba con insistencia frente a la ventana. En el breve instante  en que su mirada se fijaba en una chaqueta tirada en el suelo, un ruido fuerte, un golpe seco hizo que el ladrido cesase. Volvió a descorrer la cortina. Descubrió a dos personas que parecían llevar a una tercera  cogiéndola de las axilas,  haciendo que sus pies  se arrastrasen por el suelo. Reconoció la voz de una de ellas. Era el hombre que poco antes estaba en la habitación. Su voz era inconfundible. La persona que llevaban parecía que se movía un poco. En un momento observó como las otras dos la soltaban y la mujer de la voz fría y monótona le propinaba un fuerte golpe con  una barra. Se retiró espantado de la ventana dando pequeños pasos hacia atrás hasta que tropezó con algo en el suelo. Eduard Muntaner se encontró de ese modo a su mujer Amparo Guillot. Extrañados se miraron comprendiendo que habían sido asesinados mientras unas voces en la sala de al lado parecían leer los titulares de un periódico riendo a carcajadas.

“Según los testigos del  fatal accidente Clara Martin  y joseph Guillot el coche del  matrimonio Muntaner  se precipitó sobre el barranco cuando regresaban de Cadaqués. Joaquín Guillot  anunció asimismo que los funerales  de su hermana y cuñado se celebrarán en la intimidad de la residencia familiar”.
 
Angela Bluetooth

 

3 comentarios:

  1. Agosto negro, negro. Suerte, Ángela.

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  2. Una triste historia contada con mucho detalle. La maldad anida en muchas personas y descubrirlo es amargo.

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  3. Triste historia. Por desgracia, suele ser real. Suerte!!

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