- “¡Este niño es tonto! Pues no dice ahora que está viendo los árboles verdes y el cielo azul...”
- “Mujer, no seas tan dura con el chiquillo. No es tonto, es daltónico”.
- “Tú conduce, y limpia el parabrisas de bichos, que no sé como puedes ver la carretera”.
La sirena de una ambulancia sonaba a lo lejos y un señor vestido de verde con sombrero negro muy raro me preguntaba: “chaval, ¿me oyes, estás bien?, ¡mírame!, por los clavos de Cristo, ¡dime algo!”
- “Le juro señor guardia, que el coche me embistió a mí”
- “Sí, sí, tranquilícese. Si se ve claro... ¿Eufemiano?,¡EUFEMIANO!... Deja al chaval y échales la manta a los padres por encima, que la gente se para a mirar”.
Gracias a Frenando. Me ha dado el pie a que la historia se acortara muchísimo.
ResponderEliminarGenial Eufrasio, pero no entiendo dos cosas en un relato tan corto, ya me vale:
ResponderEliminar1º Si el niño es daltónico, ¿cómo es que ve bien los colores¿, ¿por la mierda del parabrisa?.
2º Se supone que al niño a quien pregunta Eufemiano es el hijo de la pareja muerta, ¿cómo le pudo embestir el coche si él iba dentro?.
Acláramelo que me tienes mosca.
¡Uf, qué susto!, creía que era la única que no lo entendía.
ResponderEliminarSí, ha sido una mala idea publicarlo. No está bien cocido, tengo que darle más vueltas... Esta semana no tengo las ideas muy claras.
ResponderEliminarEl niño es daltónico viendo los colores de nuestra realidad, su realidad es azul y ocre. Yo lo que entiendo que en un coche van unos padres con su hijo hablando y chocan con otro coche. Viene la ambulancia y uno atiende al niño, mientras el otro atiende al conductor del otro coche, que es el que dice "Le juro señor guardia, que el coche me embistió a mí". ¿Es así la historia?
ResponderEliminarPerdón, me perdí en el accidente.
ResponderEliminarVamos a ver... está claro. La ambulancia era para los bichos que tuvieron el accidente con el limpiaparabrisas. Lo dice bien claro el bichejo:" Le juro señor guardia, que el coche me embistió a mí”. Al parecer los padres tenían frío y por eso le pusieron una manta. Es un detalle en estos tiempos de insolidaridad. Yo te comprendo Eufrasio. Claro que te comprendo.
ResponderEliminarno será que los daltónicos son los padres? porque el niño ve bien los colores.
ResponderEliminarAaaaaahora sí.
ResponderEliminarBravo, Marige. Esa era la idea.
ResponderEliminarDe verdad? no sabes la alegria que me das Eufrasio porque esta semana estoy poco fina.
ResponderEliminarNo obstante, nadie puede asegurarnos que los árboles sean REALMENTE verdes. Enhorabuena Eufrasio.
ResponderEliminarNingún objeto es realmente del color que se muestra. Tan sólo se trata de percepciones. Los colores no existen en el universo. Son fabricados por nuestro cerebro. Por tanto en sentido estricto no son verdes, ni rojos ni azules...
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