- y continuando con nuestra conversación en el café... Crees que te publicarán la novela en la que estás trabajando? - comentó Harold Wert
- Bueno, a decir verdad, ese no es el problema - dijo Ronald Craw pensativo - realmente lo que me preocupa es que ya desde hace unas semanas no escribo nada que valga la pena - agregó
- Eso es realmente preocupante, recuerdo esos estados en los que piensas que ya nada vendrá a tu mente y la desesperación que sientes, pero seguro que es transitorio, querido Ronald.
Seguían absortos en la conversación sin haberse percatado todavía de la presencia de una tercera persona tras ellos. En un momento observaban los tres las sombras reflejadas en el suelo. Al pequeño Valerian le hacía gracia que las tres convergiesen en un mismo punto, como si los tres formaran parte de un mismo cuerpo y enseguida comenzó a imaginarse heredero del pasado. Su futuro también haría nacer reflejos que otros seguirían de forma inconsciente hasta formar parte de esa gran sombra en donde muchos se cobijan.
- Por cierto, Harold, he leído que el día 30 de Marzo se presenta un libro en el Círculo de Bellas Artes de Valencia. Podríamos ir, te distraerías, no te presionarías tanto.
- ¿Una presentación de un libro? - preguntó con interés
- Sí. Alguien me lo ha comentado. No estoy muy seguro quién es el autor pero... - replicó Ronald sin acabar la frase ya que una voz infantil comenzó a hablar
- Perdonen, me llamo Valerian, aunque mi verdadero nombre es muy largo. En realidad son muchos nombres. Me pueden llamar Valerian o Valencia Escribe. El caso es que les he oído durante este trayecto y he de decirles que son para mí un ejemplo y me sentiría muy honrado que estuvieran en Valencia el día 30. Es la presentación de mi libro - dijo Valerian tímidamente
- ¿Valencia escribe? - dijo Harold sorprendido - ¿Y tú eres el autor del libro? - añadió
- si - contestó el niño sin apenas elevar su mirada
Los dos hombres se alejaron calle abajo satisfechos de que las palabras nunca morirían. Detrás de ellos siempre vendrían nuevos nombres que vivirían y harían vivir los sueños a todo aquel que se dejase mecer en una hojas.
Para todos los "Valerian". Para Valencia Escribe
- Bueno, a decir verdad, ese no es el problema - dijo Ronald Craw pensativo - realmente lo que me preocupa es que ya desde hace unas semanas no escribo nada que valga la pena - agregó
- Eso es realmente preocupante, recuerdo esos estados en los que piensas que ya nada vendrá a tu mente y la desesperación que sientes, pero seguro que es transitorio, querido Ronald.
Seguían absortos en la conversación sin haberse percatado todavía de la presencia de una tercera persona tras ellos. En un momento observaban los tres las sombras reflejadas en el suelo. Al pequeño Valerian le hacía gracia que las tres convergiesen en un mismo punto, como si los tres formaran parte de un mismo cuerpo y enseguida comenzó a imaginarse heredero del pasado. Su futuro también haría nacer reflejos que otros seguirían de forma inconsciente hasta formar parte de esa gran sombra en donde muchos se cobijan.
- Por cierto, Harold, he leído que el día 30 de Marzo se presenta un libro en el Círculo de Bellas Artes de Valencia. Podríamos ir, te distraerías, no te presionarías tanto.
- ¿Una presentación de un libro? - preguntó con interés
- Sí. Alguien me lo ha comentado. No estoy muy seguro quién es el autor pero... - replicó Ronald sin acabar la frase ya que una voz infantil comenzó a hablar
- Perdonen, me llamo Valerian, aunque mi verdadero nombre es muy largo. En realidad son muchos nombres. Me pueden llamar Valerian o Valencia Escribe. El caso es que les he oído durante este trayecto y he de decirles que son para mí un ejemplo y me sentiría muy honrado que estuvieran en Valencia el día 30. Es la presentación de mi libro - dijo Valerian tímidamente
- ¿Valencia escribe? - dijo Harold sorprendido - ¿Y tú eres el autor del libro? - añadió
- si - contestó el niño sin apenas elevar su mirada
Los dos hombres se alejaron calle abajo satisfechos de que las palabras nunca morirían. Detrás de ellos siempre vendrían nuevos nombres que vivirían y harían vivir los sueños a todo aquel que se dejase mecer en una hojas.
Para todos los "Valerian". Para Valencia Escribe
Si Jose Luis nuestro libro es un bebé que con el tiempo tendrá hermanitos mayores, padres y abuelos.
ResponderEliminarBuen regalo, José Luis.¡Ojalá que todos pudiéramos reunirnos en torno a Valerian mañana!
ResponderEliminarTe faltan un par de "de" en estas frases:
No estoy muy seguro quién es el autor pero... -
muy honrado que estuvieran en Valencia el día 30.
Qué tierno...José Luis! De acuerdo con Geli ¡Ojalá!
ResponderEliminarGracias, J.L. Emocionante. Ya estamos encargándole un hermanito.
ResponderEliminarBonito texto, muy metáfórico.
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