lunes, 29 de octubre de 2012

Solución



No quería volverme loca a causa de tu abandono, por ese transcurrir de las horas sin saber nada más de ti. La categoría temporal para mí   tenía existencia por sí misma y no dejaba de mirar los minutos que pasaban a engrosar el tiempo perdido. Te habías convertido en mi obsesión y monomanía. No hallando respuestas por tu parte, decidí colgar el pequeño reloj que me regalaste de uno de tus viajes a Suiza en la rama de un árbol del jardín. Allí estaría mejor que conmigo, formaría parte de la naturaleza, mediría el paso de las estaciones, la alternancia del día y la noche o lo que duraba el nacimiento de una flor. Fue el mejor regalo que me pude hacer a mí misma.

9 comentarios:

  1. Me has cogido pensando también en el tiempo, buen micro, Maga. Un abrazo.

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  2. Dejaste su memoria a merced de las inclemencias y caprichos del tiempo. Colocaste de forma premeditada en la intemperie los sentimientos, como en un limbo perdido... Me gusta.

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  3. Malén, precioso. Menos mal que has hecho los deberes antes de marchar de puente, porque si lo dejas estar, nos hubiéramos quedado sin poder disfrutar de este micro. Besotes

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  4. Me ha encantado Malén.Me gusta esa frase final. Todos los días deberíamos hacernos regalos a nosotras mismas y, si encima, te quitas de encima algún lastre del pasado, mejor.
    Espero que disfrutes durante el puente. Besitos.

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  5. Muy bueno. Y estoy de acuerdo en que deberiamos hacernos ese tipo de regalos, nada mejor para pasar página.

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  6. Una mujer valiente tu protagonista; pasar página una decisión muy acertada. Muy bien elaborado Malén

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  7. Malén, me ha gustado especialmente esa palabra "monomanía" es estupenda. Saludos.

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