Volar es emocionante. Ahora estoy en un país cálido y en unas horas necesitaré un abrigo. Es mi pasión. Paisajes diferentes, costumbres distintas, sabores variados. Y tú me pides que eche el ancla. Que me quede varada a tu lado.
El parque cobija tus ruegos, en silencio. La naturaleza escucha conmigo tus palabras. El viento llueve hojas sobre nuestras cabezas. Vuelan lejos.
Te las muestro: míralas, no tienen voluntad, ellas van donde las lleva el viento. Te quedas mirándolas. Yo me alejo.
Muy bonito, Yolanda.
ResponderEliminarMuy poético!!
ResponderEliminarMuy hermoso y nostálgico... Me gusta
ResponderEliminarBello y triste, la protagonista sí tiene voluntad: alejarse.
ResponderEliminarJo, Yolanda, es muy poético, me encanta.
ResponderEliminarnostalgico, melancolico.me gusta
ResponderEliminarGracias, quise mostrar a través de la imagen de la hoja a merced del viento, el carácter de la protagonista es un ser libre y no puede quedarse al lado de él, por ese motivo.
ResponderEliminarAcabo de releerlo y sobra un viento por ahí, hay dos y en tan poco espacio..., mal. En fin, no estoy para correcciones.
Abrazos, nos leemos. ;)
Muy bello Yolanda
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