En lo más alto. En la cumbre. En la cima del éxito. El público rendido y el miedo agazapado junto a la soledad. Un escenario y un personaje vigilante y vigilado, con el acoso pegado día y noche a la piel.
Los días deslucidos por la sombra de una amenaza que sólo él pudo borrar.
Él..., sembrando distancia y ejerciendo de imán.
Arriba en el escenario, desplegadas las alas mientras canta, sólo están su público y su voz fundidas en una conexión invisible.
La partida la ganó esta vez la vida.
Él cumplió su parte. Ella fue otra vez libre.
Hemos despertado con la noticia de la muerte de esta artista única, nos queda el consuelo de esa parte que nadie puede arrebatarle a los grandes y que les mantiene vivos: su legado.
Precioso Yolanda, cambiaría los gerundios por "sembraba y ejercía". No me había enterado de su muerte.
ResponderEliminarPues yo me he enterado esta mañana. Precioso homenaje, Yolanda.
ResponderEliminarMuy bello y muy triste la noticia.
ResponderEliminarMerecido epitafio para una gran artista, que posiblemente nunca supo digerir su propia grandeza. Muy bueno Yolanda.
ResponderEliminarGran homenaje para una voz que vivirá siempre en nuestro recuerdo. Tu texto, fenómeno.
ResponderEliminarDebo decir Yolanda, que me gusta mucho más tu relato que la peli.La voz de la Houston inolvidable.
ResponderEliminarBonita dedicatoria. Aunque yo no estoy nunca a favor de idolatrar a artistas que se han hundido en el mundo de las drogas y las fiestas. Son un espejo de lo humano y esos comportamientos que los llevan a la muerte no debían ser ni siquiera anunciados. Es triste, si, pero ella se lo había buscado.
ResponderEliminarYo me quedo siempre con lo positivo, su voz lo era y es lo que va a prevalecer. El relato lo hice inspirado y pensando en la peli, aunque se me ocurrió al oir la noticia. Respecto al porqué de sus adicciones, vicios y demás desmanes, no quiero erigirme en juez de nadie y menos de un mundo que desconozco y que arrastra a muchos de los que en él se mueven, por esos fangos (algo debe tener). Un abrazo.
EliminarNo lo he dicho por criticar, solo que me da rabia que gente como ella se pierda de esa manera. Lo tenía todo y vivía de sus sueños, me parece tan triste...
EliminarGeli, tienes razón la peli es un poco ligth, pero por la música (y por Kevin Kostner ¡por Dios!), merece la pena para pasar un rato sin pensar mucho. Un abrazo.
ResponderEliminarMuy bonito y triste a la vez, yo estoy contigo¡ por diosss Kevin Kostner! menudo guardaespaldas.
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