-Dime que me quieres, cariño.
-Te quiero, muñeca.
-Dime que me adoras, cielo.
-Te adoro, mi amor.
-Dime que me necesitas, osito.
-Te necesito, nena.
-Dime que nunca me abandonarás, vida mía.
-Nunca te abandonaré, princesa.
-Dime que nunca me abandonarás, vida mía.
-Nunca te abandonaré, princesa.
-Dime…
-Perdone, Susan, pero ya hemos
llegado a su casa. La sesión de hoy ha terminado. Volveré a por usted el próximo jueves a las
siete. Recuerde que ha de seguir tomando las pastillas.
Jajaja, buena terapia, Rafa, a ver si la pones de moda.
ResponderEliminarNo sé cuál está más cencerro de los dos...
ResponderEliminar¿Qué es estar loco? Muy buen micro Rafa, estás que te sales.
ResponderEliminarGracias, Per. A ver si te animas y publicas tú también aquí. Aunque se llame Valencia Escribe, es un blog sin fronteras.
EliminarJaja, me encantan estos micros... Y con sabor terapeútico!!
ResponderEliminarPsiquiatra a domicilio que te dice lo que quieres oír... Hay que patentarlo.
EliminarPsiquiatra a domicilio que te dice lo que quieres oír... Hay que patentarlo.
Eliminar...Yo quiero un botecito de esas pastillas, Rafa. Genial el micro. Me encantó
ResponderEliminarGracias, Reca.
EliminarQué desengaño! Muy bueno!!
ResponderEliminarJa ja ja ¿desengaño?
EliminarBuen micro Rafa. Con estas risas que nos echamos al leerlo, hacemos pura terapia.
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