martes, 21 de mayo de 2013

Lu in the sky with diamonds


Mi mamá dice que la vida es como una caja de bombones, nunca sabes qué te va a tocar (Forrest Gump)


Admiro a una gran escritora que se llama Lu y que se encuentra hace meses desaparecida en combate. Por eso he decidido formar un comando para encontrar y salvar a la soldado Hoyos. Ignoro si esta pequeña pero valiente tropa, con sus lápices y ordenadores como única arma, tendrá o no éxito en su misión, lo cierto es que todos vamos a esforzarnos para recuperar a la compañera y cuanto antes, mejor. Tampoco conozco los motivos que le han impulsado a abandonarnos o a abandonarse, pero una persona como ella, que lleva las letras en la sangre, siempre es útil y debe estar disponible para nuestra causa. Así es que, como ideólogo de esta empresa, propongo que cada un@ de vosotr@s redacte un texto conminando a su regreso más inmediato. Sé que puede ser una campaña dura, pero hemos de afrontarla entre todos. ¡Que la fuerza nos acompañe!

7 comentarios:

  1. Jajaja, Rafa, eres tremendo. Venga, qué la fuerza nos acompañe. Un abrazo.

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  2. Lu, te echamos de menos. Vale, ponte a trabajar... necesitamos tus historias de nuevo.

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  3. Ánimo, Lu!! Tú puedes...
    Aprovecho este comentario para animar también al esto de soldados de la tropa de Valencia Escribe y que andan, como ella, perdidos en combate. No sé qué nos ha pasado... ¡todos sois buenísim@s escritores...!! Acordaos de los buenos momentos que hemos pasado aquí y olvidemos los menos buenos (que tampoco fueron tantos...)
    Un abrazo a tod@s!!

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  4. Saludos a las tropas...
    Las cosas tienen sus ritmos, y a veces te dejas llevar por el tsunami de la vida y hay que dejar cosas aparte.No pasa nada.No obstante, buscaré a la soldado Lu. Aunque , gracias al relato ya me la puedo imaginar en el cielo rodeada de diamantes...
    Un abrazo a todos

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  5. NO había leído esta ficción y he seguido las orientaciones de Rafa sin saberlo en el comentario anterior, a ver si es cierto y nos animamos. La vida nos arrastra, nos atrapan las preocupaciones y cuando nos paramos a escribir te das cuenta de que no decimos nada nuevo y encima lo hacemos mal. Hablo por mí, claro, de ahí el desánimo. Pero tendremos que superarlo.Un abrazo a tod@s!!

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