Louis Stettner
Aunque me había especializado en crónicas de sucesos para la
revista en la que trabajaba, aquella visión me quitó el aliento. Tranquila, respira hondo -me dije-. Después
de tanto tiempo, mi corazón había sabido crear una coraza y había aprendido a defenderse. La imagen solo fue un relámpago. El taxi pasó de
largo y mis emociones, también.
Lo breve, si excelente, dos veces excelente, Malén. Un abrazo.
ResponderEliminarCierto, Maga, excelente micro. Un abrazo.
ResponderEliminarMuy bueno!!
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