lunes, 23 de septiembre de 2013

Pensamientos fúnebres






No sabía qué hacer  para recuperarlo, lo había intentado todo.  Se iba  -o peor aún-  ya se había ido.  Se sentía solo, viejo, gastado… Tantos años juntos y, en un abrir y cerrar de ojos, la relación había terminado y ahora él se hallaba mortalmente perdido. Sentía una honda culpabilidad por haber pensado que la vida compartida era para siempre y no haberla mimado más. El día que le dijo que se marchaba y que no había vuelta atrás, la vida en soledad se le echó encima como una losa de enterramiento. 

6 comentarios:

  1. Muy bien escogido el vocabulario para expresar las sensaciones del protagonista. Muy bueno, Malén!

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  2. Muy bueno Malén. Aunque no me acaba de sonar muy bien lo de "una losa de enterramiento". ¿Qué tal "la losa de una tumba"?

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    1. Muy bien, Rafa, pensaba en las grandes piedras prehistóricas de los talaióticos o de los mayas, pero es cierto que no suena muy bien, Gracias,

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  3. Triste lamento por la pérdida."No sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos", creo que es la verdad más grande que existe. Saludos

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  4. Muy cierta la metáfora, la soledad en momentos así se percibe como una losa, el cuerpo pesa como se refleja en la pintura y tan bien has transmitido en tu micro. Un saludo.

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