martes, 17 de enero de 2012

EL ENFERMO

ESTILO DIRECTO

"Esto de enfermar de vez en cuando es un chollo", pensó el tipo.


-¡María! -gritó- ¡Tráeme el desayuno a la cama! !Y date prisa!


María llegó agitada, casi dejando caer todos los chismes de la bandeja.


El enfermo dio un sorbo al café y lo apartó de sí.


-¡Puagh! ¡Está frío! ¿El café se sirve frío? Y lo has llenado demasiado. Llévatelo, caliéntalo más, llena menos el vaso... La mujer sumisa desapareció.


-¡Y no tardes que es para hoy!- Le siguió la voz.


Apareció al poco tiempo, como temiendo haber tardado demasiado.


-¡Uf! Demasiado caliente -despreció el marido-. Si querías achicharrarme, ¡dímelo con claridad! Y sigue igual de lleno. ¡Todo lo haces a medias! ¿Es que no sabes hacer nada bien a la primera?


La mujer volvió a retirarse decepcionada.


-¡Enciende el televisor, tráeme el periódico, ventila bien la habitación..!¿Es que no ves que estoy enfermo?


-Ya lo veo- susurró la mujer.


La voz de María dejó vagar un cierto tono de cercana venganza.





ESTILO INDIRECTO


El tipo era un tirano y su mujer una triste sumisa.


Lo que me faltaba -pensaba ella con resignación- era aguantarlo durante días enteros en casa.


Si pedía el desayuno, al instante lo tenía sobre la cama. Nunca agradecía nada: ni unas palabras amables, ni una dulce sonrisa; el café siempre estaba muy frío o muy caliente, o el vaso demasiado lleno. Pero lo que más le dolía de todo era el tono de prepotencia conque se dirigía hacia ella.


Regresaba una vez más a la cocina, a calentar el café, bulléndole aún en la cabeza la últimas críticas crueles recibidas, mientras le acompañaban nuevas órdenes como enciende el televisor, tráeme el periódico, ventila de una vez la habitación...cuando algo cambió en su interior. Sabía que había traspasado una frontera: la insumisión.


Ahora, mientras retornaba con la bebida, hirviendo peligrosamente entre sus dedos, supo que la hora del castigo había llegado.





INDIRECTO LIBRE


Pensaba que esto de caer enfermo de vez en cuando no estaba mal del todo. podía pedir cuanto se le antojase y tiranizar más aún a su mujer. El café siempre estaba frío o caliente, así que a calentarlo o enfriarlo. Aquello tenía su puntito: sentir el poder sobre la mujer y dejar bien claro quién llevaba allí los pantalones. Si el vaso estaba lleno, se quejaría por ello, si lo vaciaba un poco, se quejaría por ello...lo importante era mantener la sumisión de su mujer; seguir hostigándola y disfrutar con aquel abandono interior de la dignidad que la atenazaba. Aunque a veces, hasta esa dejadez en María le irritaba.


La última vez que había estado en el cuarto la había criticado con cierta crueldad y, aún así, había obtenido su silencio. La siguió acribillando con exigencias, sin piedad, tantas, que hasta a él mismo le parecieron exageradas.


Pero esta vez, mientras escuchaba los pasos de María acercarse hacia él, algo se removió en su interior. Sin saber por qué, presintió que en un segundo alguna cosa en ella había cambiado. Se respiraba cierto aire de ajuste de cuentas.




12 comentarios:

  1. Muy bien, Manuel, parece que la venganza se acerca más en cada relato. He visto faltas, te digo algunas: creo que a veces pones" -," y sobra la coma, como en la 1ª línea.
    "Si querías achicharrarme, ¡dímelo..." Puesto que no hay punto, no hace falta mayúscula, creo.
    "hirviendo".
    También te he acercado las líneas, estaban un poco separadas.

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  2. OK, Lucrecia, paso a corregirlas ahora mismo. Lo que no sé es por qué el editor de texto me ha separado tanto las líneas.

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    1. Yo tampoco lo sé, te las he acercado y se han vuelto a separar. Misterios del blog.

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  3. Manuel parece que lo has conseguido. Los tres estilos pienso que están muy bien conseguidos y diferenciados. Estupendo!!!

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    1. Gracias, Amparo. La verdad es que este ejercicio me ha gustado mucho. Es como ver el mismo objeto desde tres planos distintos.

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  4. He copiado el texto y lo he vuelto a pegar, a ver si ahora no se mueve.

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  5. Lo he arreglado. A ver si se queda quieto. En los tres estilos, y también ella lo ha arreglado. Muy bien!!

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  6. ¡Menuda jeta la del Sr. marido! ¡Bien, Manu, bien! Ahí van mis observaciones:

    -Esto de enfermar de vez en cuando es un chollo -pensó el tipo. Lo que piensa un personaje se pone entrecomillado, sin guiones y ,(coma) después. Ejemplo:
    «Esto de enfermar de vez en cuando es un chollo», pensó el tipo.

    María llegó, agitada, casi dejando ..llegó agitada,
    -¡Y no tardes, que es para hoy!- (¡Y no tardes que es para hoy! -le siguió la voz.)

    La mujer volvió a retirarse, decepcionada.(fuera coma)

    Ya lo veo, ya- susurró la mujer. (Ya lo veo, ya -susurró la mujer.)

    ESTILO INDIRECTO
    Lo que me faltaba, pensaba ella con resignación, era... (yo lo pondría entre guiones -pensaba ella con resignación- era...)

    con la bebida (,coma)hirviendo peligrosamente entre sus dedos,

    INDIRECTO LIBRE
    ¡Ojo! se te ha despistado una minúscula detrás de punto y seguido.
    un poco del líquido. (Fuera del líquido. Innecesario)

    Una buena crítica al machismo que aún impera en buena parte del mundo.

    Un abrazo, Manuel.

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    1. OK, Geli, gracias por las correcciónes. Comienzo a aplicarlas.

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    2. Hola, Geli. Me parece bien. Lo cambio y vemos qué tal queda.
      Un saludo, amiga.

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  7. Muchas gracias, amigas, habéis arreglado el formato del texto...me da a mí que he sido un poco cazurrón en este menester, jejejejee.

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  8. Manu, ya me pasó la primera vez que lo leí, pero el verbo promocionar me chirría en esta frase:

    seguir promocionando aquel abandono interior

    ¿Qué tal con un verbo como hostigar?

    Pasa buen día.

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