martes, 3 de mayo de 2011

FUNERAL

Y todo se hizo tal y como él dejó escrito...

            La banda de música interpretó cada una de las piezas indicadas, en su mayoría melodías de jazz de los años 30 y 40, normalmente de Duke Ellington, mientras Ana, su mujer y ya viuda, transportaba cuidadosamente el pequeño recipiente donde estaban sus cenizas. Cuando la comitiva llegó al lugar indicado, la banda dejó de tocar. Durante unos segundos únicamente se escuchó el sonido de las olas abrazando desesperadas las rocas del malecón. Como en una celebración litúrgica, sus amigos y compañeros comenzaron las lecturas pertinentes. La primera, el pasaje de las sirenas de La odisea, hizo recordar a todos su pasión por la cultura griega y los textos homéricos. Ana se giró, miró a los chicos y chicas de Valencia Escribe y les dijo: él siempre decía que toda la literatura se encuentra en Homero; lo que se ha hecho después no es más que un ejercicio de repetición, con mayor o menor fortuna. Todos sonrieron al reconocer en esa frase la típica radicalidad apasionada de su ya ex compañero de andanzas literarias. El salmo fue un poema de Antonio Machado que, emocionada pero con entereza, leyó Tula, su hermana. Antes de proceder a la segunda lectura, un trozo del primer capítulo del Ulises de Joyce, sus hermanos y hermanas repartieron entre los asistentes botes de cerveza. Mientras las palabras del irlandés universal surcaban el aire como gaviotas de tinta, el sonido de las latas de cerveza al ser destapadas fueron el prólogo al brindis. Y una vez brindaron llegó la lectura del evangelio según Cervantes: “En un lugar...”. Ana lanzó sus cenizas al mar, al tiempo que la banda comenzó a tocar una adaptación de Satin Doll. Ahora, dijo Ana, vamos a casa. Mientras yo preparo café cada uno de vosotros escogerá tres libros de su biblioteca y se los quedará para siempre. Todos volvieron a sonreír. Su funeral ha sido su última creación literaria, dijo uno de los asistentes. Sí, comentó otro, Marco Antonio era así.

8 comentarios:

  1. Aggggggggggggg, espero que no sea verídico, ¿eso quieres cuando te mueras? Me ha gustado.

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  2. Por supuesto, punto por punto, jajaja.

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  3. Es como un sueño de esos que dicen que no podemos tener. Me ha encantado.

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  4. Me ha gustado, Marco, pero me ha puesto los pelos de punta...

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  5. Precioso, pero no pienso leer ningun salmo, porque por ley de vida lo tendrás que leer tu primero y y sabes que yo prefiero algo cantao por el manzanita jeje. Un beso de bomban... para Scub...

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  6. Marco, espero que nos conozcamos en mejores circunstancias, no me gustaría encontrarte en un bonito jarrón lleno de cenizas; el relato divino, como siempre, a ver si nos vamos a ese mar todos juntos, pero con unas cestas y un mantel. Enhorabuena, me encantan tus historias.

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  7. Esperemos que no sea la última y que nos sigas deleitando con otras historias.

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  8. En lata, en lata, ¿cómo que la cerveza en lata, Marco Antonio? En botella y con jarras de cristal bien frías. No te preocupes, el sonido de las botellas al ser destapadas será igual que el de las latas; las jarras de cristal las pongo yo; y la nevera para las cervezas frías también. Aconsejo que otro lleve algo de picar porque el pedo que podemos coger puede acabar con algun@ que otro cayendo, como las cenizas, al mar (Shoffff)

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