jueves, 21 de abril de 2011

UN GORRO NEGRO Y PUNTIAGUDO

Me daban miedo. No podía evitarlo, aunque tengo que reconocer que ejercían sobre mi una fuerte atracción, tan llenos de misterio, siempre erguidos y moviéndose todos a la vez, iba de la mano de mi abuela y cuando... se acercaban le apretaba tan fuerte que me regañaba, ¡pero niña, que me haces daño!; el sonido de sus trompetas traspasaba mis tímpanos y me transportaba por lugares que, mi caprichosa imaginación llenaba de misteriosos templos y siniestros y ancianos sacerdotes; en algún recoveco de mi infantil cerebro se mezclaban retazos de visiones borrosas del Ku Klus klan, (que espié furtiva mientras mamá la veía con las tías), con los papones, unos y otros se me antojaban seres venidos de lejanas galaxias.
Cuando conocí a Gabriel y me confesó su devoción y las fechas que inexcusablemente había que reservar para sus desfiles como papón, me quedé petrificada, lo intenté pero no pude seguir con él, cada vez que se me acercaba en la intimidad, me lo imaginaba con el gorro puntiagudo negro y amenazante sobre su cabeza y mi libido se desmoronaba cuan endeble castillo de arena hacia la apatía y el más frío de los fríos, una pena, era tan mono.

9 comentarios:

  1. Bien redactado Yolanda, me gustan tus criterios de selección de pareja, son muy sofisticados.

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  2. Buen relato Yolanda. Creo que algunas comas podrían ser puntos, pero tampoco me hagas mucho caso. El uso de la palabra "papones" delata un origen leonés. Enhorabuena!!!

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  3. Tienes razón Marco, es que las comas y yo tenemos una difícil relación. Gracias.

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  4. He visto en muchos relatos los ... cuando no proceden, por ej. aquí aparecen después de cuando sin que yo los haya puesto ¿alguien sabe por qué?

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  5. Al subir los relatos al blog, por diferencia de criterios entre el ordenador y el sangrado de lineas, aparecen sin poder evitarlo.

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  6. ¡Qué buena historia Yolanda!La verdad es que la vestimenta de los papones sólo tiene dos opciones:te gustan o te asustan,y ambas cosas marcan,la verdad.¡Mira qué tienes madera amiga!.Felicidades.

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  7. A mi me ha parecido muy bueno!!! Y además me he sentido un poco identificada con la protagonista, también me daban miedo los nazarenos de niña y no me imagino qn ciertos momentos con uno de ellos...

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  8. Muy bueno, Yolanda, ocurrente y divertido. Yo no me identifico porque mi padre y mi hermano se vestían, me encantaba. Estaba prohibido para las mujeres en aquellos tiempos pero yo no paré hasta que salí con el traje de mi hermano amparada en el anonimato del capuchón.

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  9. ¡Bien hecho Lucrecia! la tenacidad mueve montañas; luchar por lo que deseamos nos engrandece y si logramos nuestro objetivo mucho más.

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