martes, 29 de marzo de 2011

Eufrasio Saluditero, DISCULPEN SI ME ENTROMETO...

Buenas noches, disculpen si me entrometo. Me llamo Aurelio Descuidado y me gusta navegar por Internet cuando llego del trabajo para relajarme antes de cenar e irme a dormir. Acabo de leer en su blog que un tal Enrique Amador Florian Rius y una señora que dice ser un fantasma se enzarzaron anoche en una pelea en una parada del autobús. Yo les escribo porque soy el conductor del autobús que tenía que pasar a esa hora por la parada, y que cuando vi que ese señor dando puñetazos a una señora (porque yo sí que vi a la señora) y que no le alcanzaba ninguno porque ella se volatilizaba para aparecer al instante detrás, pues me asusté tanto que giré por la primera calle que pude. Por el espejo retrovisor seguí viendo la escena y casi atropello a tres jóvenes que cruzaron corriendo la calzada sin mirar. Frené en seco. Llevaban una bolsa de deportes pequeña de marca “Dopat”, una chaqueta roja con franjas verdes y puntitos amarillos y uno de ellos, el de la gorra con visera azul que ponía “Rius, capador de aves de corral”, se me quedó mirando con una media sonrisa. Sí, para risitas estaba yo. Me fui directo a cocheras con un escalofrío recorriéndome todo el cuerpo. Cuando llegué los compañeros me dijeron que estaba blanco, que si había visto un fantasma – sí, claro, un fantasma, je je, que graciosos, es que estoy cansado y creo que me he resfriado – alcancé a decirles.
Yo estoy muy asustado. Llevo dos días sin comer, sin dormir y sin ir al trabajo; y voy a pedir el cambio de línea. Yo por ahí no vuelvo a pasar. Gracias por haberme atendido.


P.D: aprovecho el medio y la ocasión para pedir disculpas a todos los usuarios que dejé colgados por no pasar por el resto de paradas, por si hubiera alguno leyendo esto.

9 comentarios:

  1. Jajaja, muy bueno. A ver si siguen apareciendo testigos e implicados en los hechos...

    ResponderEliminar
  2. Esto es como la saga de la guerra de las galaxias, jeje, solo falta el testimonio del policia. Muy bueno si señor.

    ResponderEliminar
  3. jajajjajajaja, muy bueno!!!!! Cómo me he reido con ese final!!!

    ResponderEliminar
  4. Esto se va enredando. Asi nacen personajes. Poco a poco La Marquesina se convertirá en una aventura en la descubriremos cosas apasionantes acerca de la vida de Enrique, Aurelio y la joven Jimenez de Castro... Pero que quiso decir con su sonrisa el jovenzuelo que llevaba la gorra del sr. Rius?... Quizá algún investigador del caso nos ponga durante esta semana en la pista final... Acaso se conocían todos ellos?
    Muy bueno, Eufrasio... Le diré a Juana que analice más a Eulalia...porque se llamaba Eulalia no?

    ResponderEliminar
  5. Buenisimo, marige creo que tambien falta el testimonio de los tres ladronzuelos aparte del policia. Haber quien se anima a terminar esta historia. Muy original

    ResponderEliminar
  6. Jajaja ¡Qué divertido! a ver si Fernando se anima a continuar la historia cuando vuelva de trabajar y envie su prometido relato, que bien nos vienen estos toques de humor y desenfado ¿a que si?

    ResponderEliminar
  7. Querido Don Aurelio, jamás quise asustarle, creame. Cada vez que llueve cojo su autobús en la misma marquesina, a la misma hora, usted nunca me cobra porque nunca me ve, si esta vez ha logrado verme, será por algo, le ruego que se haga un chequeo médico lo antes posible. Se lo que me digo.
    Eternamente suya,
    Eulalia.

    ResponderEliminar
  8. Jajaja, muy buenos ¡cómo me lo estoy pasando con Las Marquesina!, sois la leche!!!

    ResponderEliminar
  9. Este testigo es muy real, pobres los usuarios que esperaron el autobús, jajajjaa

    ResponderEliminar