lunes, 19 de septiembre de 2011

AVANCES TECNOLÓGICOS

Leocadia cogió su mando a distancia y bajó el volumen de la clase que  empezaba a alborotarse. Estaba inmersa en  un libro apasionante. Aprovechaba la hora de atención educativa, en la que los alumnos debían hacer sus deberes, para desconectar un poco y dedicarse a la plácida lectura. En un inciso, mientras pensaba una frase que le había llamado la atención, levantó la mirada y observó que solo quedaban 15 minutos y que pronto sonaría la música que anunciaba la clase siguiente en la que tendría que explicar la teoría de las Ideas de Platón. Volvió a coger el mando y apretó el botón de "pausa", quería tener tiempo para conocer el final de la novela y para ello necesitaba media hora más. Se produjo un silencio total y los alumnos quedaron inmóviles mientras el reloj se detenía y ella seguía deleitándose con el inminente desenlace. Unas lágrimas resbalaron por sus mejillas cuando leyó la última línea.
 Apretó el "play" y la animación volvió a la clase que siguió con su  cháchara habitual. ¡Cómo le había cambiado la vida desde la implantación del microchip en el cerebro de los chicos! Ahora los manejaba a su antojo.
-¡Leocadia, Leocadia, despierta!, que te has quedado dormida y tus alumnos se han escapado por la ventana -le dijo el profesor de guardia-, el director está furioso y me ha dicho que vayas inmediatamente a su despacho.
Se levanto nerviosa y preocupada, fue al servicio de profesoras y  fumó cinco cigarrillos, uno detrás de otro, mientras se metía entre pecho y espalda unos buenos tragos de bourbon de la petaca que llevaba siempre en el bolso. Salió segura de sí misma  y dispuesta a encarar relajadamente la entrevista.

10 comentarios:

  1. Otra aventura de Leocadia!!! Muy bueno Lucrecia. Un personaje que necesita evadirse de la realidad y termina apoyándose en el tabaco y el alcohol para poder afrontarla: Ufff!!!

    ResponderEliminar
  2. Así son la cosas.Comola vida misma.Tengo que buscar mi petaca por casa.Muy divertido.

    ResponderEliminar
  3. Estás creando una heroína novelesca a la altura de la Maga, la Colometa o incluso de Anne la de las tejas verdes, lo malo es que fuma demasiado.

    ResponderEliminar
  4. Genial, hay que ver con Leocadia, está lanzada, lo del mando sería la bomba, quién sabe si allá por el 3000...

    ResponderEliminar
  5. Leocadia, nos has mostrado otra de tus pasiones ocultas, yo también creo que el mando daría la vuelta al mundo. Muy divertido Lucrecia.

    ResponderEliminar
  6. Muy bueno Lucrecia, esta Leocadia nunca deja de sorprendernos!!!

    ResponderEliminar
  7. Esta loca de Leocadia va a durar poco, díselo de mi parte. Muy divertido.

    ResponderEliminar
  8. Ya echábamos de menos a Leocadia, lo que no le pasa a esta pobre mujer. Muy bueno

    ResponderEliminar
  9. Me ha encantado lo del mando, a mí también me hubiera gustado tener uno en algún momento de mi vida ¡Bravo por Leocadia!

    ResponderEliminar